S. Santos Lasaosa, PhD, E. Bellosta Diago, MD, J. Navarro Calzada, PhD, A. Velázquez Benito, PhD Author Notes
Resumen
Antecedentes. Los pacientes con cefalea en racimos tienden a tener una desregulación de la presión arterial sistémica, como un aumento de la variabilidad de la presión arterial y una disminución del descenso nocturno. Este patrón de no inmersión nocturna se asocia con daño de órganos diana y mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
Objetivo. Determinar si la cefalea en racimos se asocia con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
Métodos. Estudio transversal de 33 pacientes con cefalea en racimos sin evidencia de enfermedad cardiovascular y 30 controles sanos emparejados por edad y sexo. Se realizó monitorización ambulatoria de la presión arterial en todos los sujetos. Evaluamos parámetros antropométricos, hematológicos y estructurales (grosor íntima-media carotideo e índice tobillo-brazo).
Resultados. De los 33 pacientes con cefalea en racimos, 16 (48,5%) no eran dippers (bajada nocturna de presión arterial), un porcentaje superior al esperado. La mayoría de los pacientes con cefalea en racimos (69,7%) también presentaban un índice tobillo-brazo patológico. En cuanto a los valores de espesor íntima-media carotídeo, el 58,3% de los pacientes se encontraban en el percentil 75, el 25% en el percentil 90 y el 20% en el percentil 95. En el grupo control, solo cinco de los 30 sujetos (16,7%) tenían un patrón no dipper (P = 0,004), con un 4,54% en los percentiles 90 y 95 (P = 0,012 y 0,015).
Conclusiones. En comparación con los controles sanos, los pacientes con cefalea en racimos presentaron una alta incidencia (48,5 %) de patrón no dipper, índice tobillo-brazo patológico (69,7 %) y valores de espesor íntima-media superiores al percentil 75. Estos hallazgos apoyan la hipótesis de que los pacientes con cefalea en racimos presentan mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.